martes, 15 de noviembre de 2011

Brutal, así de simple, ONSLAUGHT reventó Lima...una crónica desde el mismo infierno...

Voy a ser sincero, la primera vez que escuché a estos británicos fue dos días antes de la fecha de este concierto, bajé algunos temas, leí por ahí algo de su biografía, y me pegó en una, no podía dejar de ir, la velocidad y fuerza con que ejecutaban su música era impresionante, había que vivir la experiencia.

Enfundado en uno de mis polos negros, que ya abundan en mi closet, llegué al Barza a reunirme con los headbangers amigos, cerca de las 8 de la noche, mientras esperábamos en plena avenida Arenales con algunos "refrescos" en mano vimos salir a dos de los integrantes de la banda, el vocalista Sy Keeler y al guitarrista Andy Rosser-Davies, quienes muy amablemente se tomaron fotos y firmaron autógrafos en plena calle.

Una sorpresa total, una mejor impresión aún, estos tipos rudos en apariencia y mucho más en el escenario no tuvieron reparos en compartir con los metalheads apostados a esas horas, luego de firmar hasta el último póster y carátula se fueron caminando por la avenida, por lo menos unas tres cuadras, cruzaron la calle, conversaban con la gente que les reconocía en el camino, para luego volver a entrar al local y alistarse para el inicio del concierto.

Aproximadamente 9:15 p.m., ya dentro del recinto, todo se oscurece, al son de una sirenas aparece la banda en pleno, Sy Keeler grita Limaaaa!!! Spitting blood in the face of God!!! y de arranque arrojan toda su descarga infernal con “Killing Peace”, “Born For War” y “Let There Be Death”, así una tras otra, con el único objetivo de volar cabezas desde el inicio.

En todo momento la banda se comunicó con el público, se les notaba contentos con la respuesta de todos en cada pogo que se armaba, así como en cada coro que repetíamos, la masacre continuó con "The Sound Of Violence”, seguido de un tema del primer álbum “Angels Of Death”, con el cual la gente simplemente se destrozó en medio de la pista.

Luego arremeten con “Planting the Seeds of Hate”, para pasar acto seguido con unas clásicas de su genial “The Force” de 1986: “Metal Forces”, “Flame Of The Antichrist” y “Demoniac”, y entre ellos el único tema del cd “In Search Of Sanity”: “Shellshock”, finalizando antes de una breve pausa con las brutales “Burn” y “Power From Hell”.

Tras el regreso entregan como obsequio “Bomber” de los legendarios Mötorhead, finalizando su presentación con la aniquiladora “Thermo Nuclear Devastation", una realmente devastadora presentación de esta genial banda que trajo consigo lo mejor de una gran época del Thrash METAL, reforzada ahora con su regreso desde el 2007, con su nuevo disco de este año “Sounds of Violence”, y con tremenda gira que los trae por estos lares.

Finalizado el concierto la banda en pleno bajó a seguir departiendo con los asistentes, así que aprovechamos para tomarnos las fotos respectivas con cada uno de ellos, el cuerpo felizmente aguantó hasta el final.









sábado, 5 de noviembre de 2011

Un Comando de Aniquilamiento llamado OVERKILL!!!...

Estoy buscando una palabra que resuma la noche de Overkill en Lima, es imposible, no se puede resumir algo tan bueno con unas cuantas sílabas juntas, diremos espectacular, increíble, brutal, y aún así no alcanzará, la performance de la banda ha sido una de las mejores que he visto, y la entrega del público más aún, esa sed de thrash que muy pocas veces saciamos en vivo hizo que el pogo dure de principio a fin, obviamente Boby "Bliss" tuvo mucho que ver en esto, en cada entrega con su rabiosa voz despertaba a los muertos, podemos decir que el Vocé ardió con el fuego de Overkill!!!...

Todo empezó con el intro del primer tema del último álbum de la banda (Ironbound), el cual, como se puede leer en cualquier fuente internauta, es el disco que los trae de nuevo al sonido clásico del Thrash, entonces se abrió la puerta del infierno con "The Green and Black", nadie se quiso quedar fuera de este estallido, la erupción continuó con el clásico "Rotten to the Core" del sangrante Feel the Fire, el primer álbum de la banda allá por 1984, el fuego ardió más aún con "Wrecking Crew" proveniente de la máxima obra de la discografía de la banda: Taking Over, discazo de 1987.

La violencia desatada (en los mejores términos por supuesto) se iba alimentando de la euforia y el éxtasis del público, lo cual era agradecido por la banda entera, en cada riff, en cada golpe de baquetas, el único descanso era cuando Boby agradecía tanta entrega con una señal hacia el corazón, la cordura se había perdido, una buena señal para nosotros.

Las ráfagas continuaron cayendo junto a temas como "Infectious" del clásico Horrorscope de 1991, "Bring Me the Night", "Hammerhead", "Ironbound", "Coma", "Give a Little", "Hello from the Gutter", "In Union We Stand", "Horrorscope" y "Old School Play Video", una mezcla de temas entrañables de la primera época de la banda unidas a lo más actual, una seguidilla de disparos a diestra y siniestra que nadie pudo, ni quiso, evitar.

La natural pausa se dio paso, básica para tomar un respiro en medio de tanta propulsión, un poco de aire para poder seguir de pie, y Overkill aparece nuevamente para reventar cabezas con "Elimination", sacudidos desde el alma nos entregan antes del final "Fuck You", cover de The Subhumans, con lo cual la relación entre la banda y nosotros se interioriza más, como si de un fuerte abrazo se tratara, respondiendo en coro cada vez que Boby nos pedía gritar ¡¡¡fuck you!!!...

El final no podía ser más perfecto, con un regalo de aquellos, la banda agradece entregando una de esas tantas joyas que tienen los míticos AC/DC, la increíble "Dirty Deeds Done Dirt Cheap", la cual sacó a flote lo último que el cuerpo podía dar a estas alturas, la masa de headbangers se agolpó hacia adelante, desatando toda la rabia contenida en proporciones escalofriantes, acrecentada más aún cuando vimos al incansable "Bliss" lanzarse desde el escenario sobre el público, muestra de lo mucho que se había divertido en esta presentación (me hizo recordar a John Bush cuando vino con Anthrax allá por el ya lejano 2005).

Luego que el frontman fuera rescatado, la banda pasa a despedirse, dejándonos totalmente satisfechos, y también dejando claro que el Thrash, y el METAL en general, jamás desapareció, siempre estuvo presente, en algunos casos un poco alejados del clásico sonido, pero la esencia se ha mantenido en el tiempo, y este renacer es producto de la fe que le tuvimos, exponenciada por cada expresión metalera, como ésta, la noche en que Overkill aniquiló Lima!!!...

Y ahora que venga Onslaught: http://www.youtube.com/watch?v=yVWE3gA_Hv8

sábado, 25 de junio de 2011

Slayer demolió San Marcos!!!...

Ahora sí, por fin vimos a los Big Four, y aunque para ello hayan pasado 6 años, entre el concierto del 2005 de Anthrax, el primero de Megadeth del 2008 y el conciertazo de Metallica del 2010, no importa, los cuatro grandes del Thrash estuvieron aquí, y una vez más los Headbangers sacudimos las cabezas.

Slayer salió 9:05 al escenario y sin saludo previo nos arremetió con "World Painted Blood" y "Hate Worldwide", temas de su última placa, el infierno se desató con el primer pogo brutal de la noche.

Luego de las primeras sacudidas Tom Araya nos dirige sus primeras palabras "Buenas tardes, bueno, y ¿cómo se sienten? ¿Están bien? ¿están listos? ¿están seguros?", como si de un anuncio de muerte se tratara, y pues no estaba tan lejos de la verdad, porque la masacre continuó con la increible "War Ensemble" y luego con "Post Mortem".

Las balas no sólo caían directas sobre quienes estábamos en el campo, las tribunas no podían esquivar semejante carga, el pogo era general ante los temas siguientes "Dittohead", "Stain Of Mind", "Disciple" y "Bloodline", nos envolvimos en el averno de la demencia.

Algunos cuerpos yacían, quienes quedaban de pie sufrieron toda la descarga de "Dead Skin Mask", "Hallowed Point", "The Antichrist" y "Americon", la promesa del concierto más brutal de la historia era realidad.

"Payback" y "Mandatory Suicide" continuaron con la matanza, para luego llegar a uno de los momentos más esperados, la oscura "Seasons In The Abyss", para dar paso al “ole ole ole ole Slayer, Slayer” en merecido reconocimiento a la banda, quienes recompensaron con "Snuff" para culminar el primer bloque del concierto.

Al regreso el intro de "South Of Heaven" envolvía a todos, y luego "Raining Blood" desató el infierno nuevamente, era el momento adecuado para reventarnos en medio del pogo, a pesar que el cuerpo ya pedía descanso.

Pero Slayer sin piedad nos atacó al final con "Black Magic" y "Angel Of Death", a estas alturas ya no importaba como despertar a la mañana siguiente, así que tuvimos que sacudirnos hasta el último riff, luego Tom se despide agradeciéndonos por los veinticinco años de espera, una espera que se desató en cada mosh, cada pogo y cada chela que nos tomamos, antes durante y después de esta masacre.

Larga Vida a Slayer!!!...

lunes, 14 de febrero de 2011

¡Nada detendrá al METAL!

Me pongo mi polo negro y retrocedo unos 15 años, voy caminando por Alfonso Ugarte rumbo al "Kaos", un terrero que servía de epicentro de los mejores conciertos de METAL de la época, ahora hay un supermercado ahí, frente a otro, en aquellos años varios comerciantes vendían carteras de cuero, coincidentemente el cuero abundaba en cada una de esas noches, eran tiempo de los "ATAQUE METAL", las mejores bandas de la ciudad subían al escenario a disparar sus ráfagas sobre los asistentes más diversos que se puedan juntar.

Cómo no recordar cada pogo con M.A.S.AC.R.E, Armagedon, Kranium, Mortem, Orgus, como las más destacadas bandas nacionales, y las visitas extranjeras de la mexicana Transmetal en el 2000, ó la increíble presentación de la sueca Hammerfall en el 2001, todo un lujo.

El "Kaos" albergó mis primeros conciertos, luego progresivamente las presentaciones se mudaron a otros recintos, eventualmente se anunciaban uno que otro con bandas mundiales, Kreator y Destruction juntos en el 2002, Sepultura en el 2004, Anthrax al año siguiente, en uno de los mejores conciertos que he disfrutado, con John Bush lanzándose desde los parlantes sobre todos nosotros.

Poco a poco el tiempo nos fue dando nuestro sitial, en el 2008 los clásicos Deep Purple regresaron después de 10 años, "Smoke on the Water" y "Black Night" despertaron los mejores recuerdos setenteros, luego el Power Metal levantó el brazo con la llegada de Helloween y Gamma Ray juntos, un concierto que tuvo como colofón a las dos bandas en el escenario interpretando "Future World" y "I Want Out". Pero la cosa se puso seria con la llegada de Megadeth en Junio de ese año, Dave Mustaine y cía. concretamente desataron toda su furia en la explanada del Monumental al son de su sinfonía de destrucción.

La súper noticia de la llegada de Iron Maiden en el 2009 remeció cada corazón metalero, remontándonos a recuerdos de secundaria, añoranza pura de tiempos inigualables, las crónicas antes y después de la presentación de la Doncella de Hierro fueron interminables, todos saltamos como niños a ritmo de "The Number of the Beast", "Run to the Hills" ó "2 Minutes to Midnight", y sobre todo cuando "Eddie" de la portada del "Somewhere In Time" hizo su aparición, fue un sueño hecho realidad.

De igual forma Kiss hizo lo suyo en aquel año, el Estadio Nacional se llenó de caras pintadas, en un show espectacular, sólo visto hasta entonces en video, una fiesta armada con pirotecnia, luces, efectos, sangre y despliegues aéreos, de la mano de los eternos Gene Simmons y Paul Stanley, el "demonio" y el "chico estrella" demostraron su vigencia a pesar del tiempo junto a sus camaradas el "gato" y el "hombre del espacio", fue puro rock and roll toda la noche. El año se completó con la vuelta de Kreator (por tercera vez) ahora junto a Exodus, en una muy buena noche thrashera.

Para el 2010 la sorprendente visita de Metallica fue el mejor comienzo de año, jamás había pogueado tanto como aquella noche, el estadio de San Marcos fue la mejor trinchera para semejante presentación, no hubo quien no derramara una lágrima con el intro de "The Ecstasy of Gold", un gran show que tuvo como espectacular cierre a James buscando personalmente que el público le coree en "Seek And Destroy".

A mediados volvió Megadeth con un concierto dedicado a la joya "Rust In Peace", cada tema del disco fue tocado en vivo sin pausa, uno tras otro, como metralleta la guitarra de Dave caía sobre el pogo que tampoco tuvo pausa. Y para cerrar el año nos cayó el "Metal God" Rob Halford, líder de Judas Priest, en lo que esperamos haya sido la premonición para la llegada de los Priest en su totalidad.

Antes que empiece el 2011, nos dieron la mejor buena nueva, Iron Maiden volvía a Lima, cumpliéndose la promesa de Bruce Dickinson de un regreso de la Bestia en exactamente dos años, con nuevo y bien mentado disco "The Final Frontier", la presentación de la Doncella promete ser el mejor de los regresos, con nuevo "Eddie", los clásicos temas no faltarán este 23 de Marzo.

No hubo tiempo de pestañear cuando llegaron las noticias de que Ozzy Osbourne el "Príncipe de la Oscuridad", líder en los 70's de la emblemática Black Sabbath, se disponía a anclar en nuestras tierras, la cita es el 12 de Abril, mes en el que también tendremos la oportunidad de ver el retorno de Helloween, ahora junto a Stratovarius, quienes también vuelven por segunda vez, esto será el 22, y para cerrar, días después, el 26 de Abril, los inigualables Motorhead, encenderán la máquina a mil, Lemmy, Phil y Mikkey no tendrán piedad.

El 3 de Mayo, Udo Dirkschnider, ex líder de Accept, llega con su banda U.D.O., para tirarnos en la cara toda su discografía en solitario, que no es poca cosa, desde el "Animal House" de 1998 hasta el "Dominator" del 2009 el pequeño Udo ha sabido mantener la energía que le diera fama con su anterior banda. Por si fuera poco, el día 11, justamente los alemanes Accept, con su nuevo vocalista Mark Tornillo, vienen trayendo consigo su batería de temas junto al himno "Balls to the Wall", además de presentarnos su gran nuevo disco recién editado "Blood of the Nations".

La historia continuará y yo seguiré poniéndome cada uno de mis polos negros, uno para cada cita metalera, ya no ando por el centro de Lima como antes, pero voy a dónde debo ir, siguiendo el camino que no tiene fin, el de ¡METAL!.

domingo, 30 de enero de 2011

Porque todo tiene un inicio

Hubieron años en que los ritmos se confundían con atentados nocturnos, caían torres de energía como si se tratara de simples naipes, la oscuridad reinaba, y no precisamente era el dueño del subsuelo el responsable, eran unos tios que se creían amos de los cerebros de los más débiles, contestarios al orden, renegados, relegados, lo más cercano a ellos un vendedor de cebo de culebra, o mejor un político de cualquier época.

En aquel tiempo, lo romántico había asaltado a lo bailable, una fusión histórica marcó el cambio de lo que existía, suavizaron lo duro, fue la explosión ochentera de la Salsa suave, y pues fue lo mejor que le pasó en ese tiempo a la pubertad, por lo menos eso creía yo, y bueno quien podría resistirse a un baile con algo más de contacto, aprenderse los pasos, pasar del uno y dos, al tres y cuatro, todo en un metro cuadrado, era genial.

Sin embargo, todo cambió en un pestañeo, solo recuerdo tener en mis manos un par de casettes, en cuyas portadas se hacía gala del pelo largo, actitud mala, y unas botas tipo vaquero que de inmediato llamaron mi atención, pero lo más importante fue el contenido, la música, los efectivos riffs, las retumbantes baterías, y las voces de sus cantantes, quienes tanto en melodiosas o aceleradas melodías echaban por tierra todo lo que creía bueno.

Se hacían llamar Bon Jovi y Guns N' Roses, y aunque hoy no suenan como antes, y sobre todo los segundos ya no están tan juntos como añoramos, marcaron un cambio, propiciaron un nuevo sentir, de ahí en adelante solo bastaba con abrir una nueva puerta y encontrar mucho más, y obviamente gastar más también, una colección de más de doscientos discos vale más por mil palabras.

El Heavy Metal y el Hard Rock habían aparecido años atrás, fueron los ingleses Black Sabbath, Led Zepellin y Deep Purple los iniciadores, pero explota comercialmente en norteamérica con el Glam Metal, luego se les une el Trash Metal y de ahí en adelante la evolución se hace interminable, luego del bajón de los años noventa, el renacimiento en el nuevo milenio es un nuevo amanecer para la mejor música de todos los tiempos.

¡Larga vida al METAL!